A lo largo de 2004, miembros de Luberri y el departamento de Geología de la Sociedad Aranzadi realizaron prospecciones por el Parque Natural de Aiako Harria, con el fin de realizar estudios sobre su patrimonio geológico y paleontológico.
En estas prospecciones se descubrieron nuevos yacimientos paleontológicos de notable interés. Se han encontrado una variada fauna marina; moluscos, equinodermos, briozoos, y restos vegetales procedentes de las primitivas áreas emergidas.
Las fósiles descubiertos pertenecen a animales que habitaron los fondos marinos del período Carbonífero (320 millones de años). conocemos en Euskal Herria.
Otros fósiles descubiertos pertenecen a primitivos vegetales Carboníferos que vivieron en lagunas costeras de las primeras tierras emergidas de Euskal Herria y pertenecen a los más antiguos pobladores gipuzcoanos.
A lo largo de 2004, miembros de Luberri y del departamento de Geología de la Sociedad Aranzadi realizaron diferentes prospecciones de superficie por el Parque Natural de Aiako Harria, con el fin de obtener nuevos datos que permitan la realización de futuros estudios sobre el patrimonio geológico y paleontológico existente en su territorio.
Como fruto de estas prospecciones se descubrió un nuevo yacimiento paleontológico de notable riqueza e interés. En la zona estudiada se ha podido detectar la presencia de una variada fauna marina, integrada por moluscos, equinodermos y briozoos, asociados a numerosos restos vegetales procedentes de cercanas áreas emergidas.
Las fósiles descubiertos en este yacimiento, pertenecen a animales que habitaron los fondos de escasa profundidad del mar que cubría toda nuestra comarca a comienzos del período Carbonífero, hace unos 320 millones de años. En aquel momento todavía no se había iniciado el proceso que daría lugar a la emersión de la enorme masa granítica que, millones de años más tarde formaría el batolito de Aiako Harria-Bianditz. El proceso de emersión de la masa granítica desde el interior de la corteza terrestre, se inició hace unos 290 millones de años y fue el causante de que en nuestra comarca surgieran las primeras tierras continentales de Gipuzkoa.
El interés suscitado por el descubrimiento de este nuevo yacimiento paleontológico reside en la abundancia de restos vegetales, transportados por flotación, desde zonas costeras cercanas. Estos restos aparecen junto a una variada fauna de moluscos marinos y nos indican que, en aquella época (hace unos 320 millones de años...) existía alguna zona emergida en nuestras inmediaciones (posiblemente el Macizo de Labourd, en Lapurdi, o los de Bortziri y, Kinto Real, en Nafarroa...), donde empezaban a evolucionar las primeras formas de vida continental que conocemos en Euskal Herria.
Los fósiles descubiertos pertenecen a primitivos vegetales, anteriores a los helechos y gimnospernas que evolucionaron a lo largo del período Carbonífero. Estos vegetales, emparentados con los actuales equisetos o colas de caballo..., prosperaron en lagunas y charcas existentes en la costa de las primeras tierras emergidas.
El yacimiento, se encuentra enclavado en las estribaciones del Parque Natural de Aiako Harria y por ello desde Luberri y la Sociedad Aranzadi propondremos a los responsables del Parque la realización de un estudio sobre el mismo, la protección del yacimiento asi como otros localizados en el interior del Parque, para evitar la destrucción o alteración de los vestigios descubiertos, pertenecientes a los más antiguos pobladores gipuzcoanos.